A veces me pregunto si el éxito de AÑOS LUZ no tiene que ver con este poema visual con el que el joven poeta Ferran Destemple participó en La Ciudad de las palabras.
La Ciudad de las palabras fue un proyecto de arte en la calle que se llevó a cabo en el Raval de Barcelona, el barrio donde está ubicado el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, en el año 1998.
Busco Poema En Esta Zona, escrito sobre una hoja de libreta cualquiera, apareció como anuncio en los lugares donde habitualmente se encuentra Busco Piso En Esta Zona — desde los soportes propagandísticos del mobiliario urbano hasta los contenedores de basura.
Uno de los secretos de la poesía es que apela directamente al corazón sin oponerse a la razón. En realidad, no son pocos los casos en los que una poesía permite comprender más y mejor asuntos humanos de gran dificultad — como cuando Federico García Lorca, un joven poeta de veinte y pocos años, en su poema Veleta, substituyó la palabra “armario” por “almario”.
AÑOS LUZ es una exposición de poesía visual para el almario. AÑOS LUZ busca provocar poesía desde la que entender un poco mejor el mundo en el que vivimos y nuestra posición en él.
Eugènia Balcells, movida por su irrefrenable curiosidad, hace años que lleva a cabo una verdadera investigación artística sobre la presencia de la luz en el universo.
Hablo de investigación porque Eugènia ha metido las narices en todos los departamentos de física, de química, de biología, en las facultades de matemáticas, de arquitectura, y en los vastos dominios de la historia de las artes, en busca de las distintas formas de aprehender y explicar la vida de la luz en estos centros.
Hablo de investigación artística porque, siguiendo una trayectoria artística iniciada en el campo del cine en los años 1980, nunca ha dejado de expandir su lenguaje artístico para dar cabida en él a esos centros de interés que han ido creciendo y afianzándose dentro de ella. A grandes rasgos, primero fue el cine experimental — ¿qué pasaría si superpusiera diferentes impresiones sobre una misma película de celuloide a partir de fijar una cámara en un punto y conectarla a un motor que girara sin parar? El resultado fue la película FUGA. Más tarde fueron los descubrimientos con el vídeo cuando aún esta palabra no formaba parte ni tan sólo del vocabulario del mundo del arte — pidió una beca para hacer un montaje de vídeo y tuvo que utilizar una perífrasis para evitar la palabra vídeo. Más tarde vinieron todos los intentos de proyectar imágenes fuera de las superficies lisas y estáticas de las paredes, atravesando pantallas, situándose en espacios creados por ella para la ocasión — aquí los ejemplos ya se multiplican exponencialmente. Sin embargo, la luz siempre en el centro. Hasta que, en su trabajo, la luz se desplaza hacia lo invisible por infinitamente pequeño y hasta lo invisible por extraordinariamente lejano: hemos llegado a AÑOS LUZ.
El contexto de esta exposición lo constituye la curiosidad de Eugènia por estas preguntas fundamentales sobre la existencia del mundo y de la humanidad en él que nacen con cada ser humano. Estas preguntas que se almacenan en la historia de la poesía y la historia de la filosofía y que activaron y siguen activando la hoy frenética actividad de la ciencia: Textos e imágenes sobre el Big Bang, la formación de los elementos primeros que Mendeleiev organizó en su famosa Tabla de los Elementos, la obtención de los espectros de emisión de cada uno de ellos, la existencia de los telescopios, las investigaciones del telescopio espacial Hubble, el recopilatorio de la NASA… campan por su estudio formando una pareja de baile con los grandes relatos sobre el origen que aportaron civilizaciones distintas.
La realidad de las obras que componen la exposición AÑOS LUZ son nuevas conexiones entre el poder de esas preguntas primeras y el conocimiento hoy disponible.
Eugènia Balcells, en AÑOS LUZ, lee de nuevo el Rig Veda, el texto más antiguo sobre el origen del universo en la tradición del pensamiento oriental, y el gran poema de Lucrecio Sobre la naturaleza de las cosas, el libro de referencia de la tradición filosófica occidental, y los acerca al conocimiento actual sobre ese mismo tema. Todo ello desde su lenguaje de frecuencias de luz y de sonido. A los visitantes se les ofrece hacer el camino inverso: que se dejen llevar por el embrujo de las instalaciones hasta desembocar en el espacio del visitante dónde cada uno pueda dejarse sentir los interrogantes nacidos de esa contemplación.
AÑOS LUZ es a la vez pregunta y respuesta, punto de partida y estación de enlace, es un alto en el camino y el camino mismo, es un principio con aires de final y un final que avanza hacia el principio. AÑOS LUZ es una invitación a sucumbir por un momento a la belleza del universo y al misterio, tan bien guardado, de la vida en él. AÑOS LUZ es una antesala en la que esperar la oscuridad necesaria para poder leer en las estrellas nuestro pasado… ¿hay algo más intrincado que esta observación? ¿hay alguna frase más extraña que esta? ¿hay algo aparentemente más contradictorio que el enlace que une obscuridad y luz? ¿hay algo más misteriosos que llegar al lugar en el que se encuentran la belleza y la verdad?
Vuelvo al principio y recuerdo de nuevo el poema visual que se distribuyó por el barrio del Raval de Barcelona como parte del proyecto La ciudad de las palabras. El poeta substituyó la palabra piso, apartamento, casa, hogar… por la palabra poema: Busco Poema En Esta Zona. Con AÑOS LUZ llegamos a casa, llegamos al hogar que la humanidad ocupa en el universo. Guiados por la persecución poética que la artista nos propone, llegamos hasta este cobijo, misterioso y revelador al mismo tiempo, en el que transcurre el devenir constante de nuestra vida. Quiero finalizar agradeciendo públicamente a Eugènia su trabajo y deseando a los visitantes de la exposición que les acompañe en su visita una actitud de abandono que les permita saberse únicos y bien acompañados a la vez. Que les permita sentir que entre el plural comunitario y el singular único median años luz.